Moshé pide suplicando a D-s para dejarle entrar a la Tierra de Israel con el Pueblo, pero D-s otra vez niega su solicitud. Moshé ordena a los Hijos de Israel tener cuidado y cumplir con las leyes dadas por D-s para que sean aptos para recibir la Tierra que le han prometido. Zonas específicas de la tierra están designadas para servir como ciudades de refugio. El convenio en Sinai y los Diez Mandamientos retirados. Se exige forzadamente al Pueblo para que siga los mandamientos de D-s. Moshé recita las palabras del Shemá, el rezo más importante del judaísmo y manda a Israel para mostrar su amor a Adonai y guardar las leyes y ordenanzas de Di-s. Moshé predice que las futuras generaciones se alejarán de Di-s, que alaben a ídolos y que van a ser exiliados de su Tierra y dispersados entre las naciones, pero desde ahí, buscarán a D-s y volverán a obedecer Sus mandamientos.
Hoy en día, los judíos estamos dispersados en todas partes del mundo y tenemos nuestras naciones. Sin embargo, lo que nos enlaza es la fé común en D-s, la religión, el idioma y la historia de las luchas y las dificultades del Pueblo judío, que siguen hasta hoy en día. Las predicciones de Moshé son la descripción del mundo judío de hoy y el alma de Moshé sigue pidiendo suplicando a D-s y a su pueblo que se cumplan las leyes y los que creen, intentan hacerlo a través de cumplir con las leyes y las mitzvot.
Sagiv Boniel
Coordinador de Marom Madrid